¿Qué es la hemocromatosis?


Un análisis de sangre es esencial para detectar el nivel de hierro en la sangre.

El hierro es un oligoelemento fundamental para la vida gracias a su capacidad de adquirir y ceder electrones. Favorece, entre otras sustancias, la producción de proteínas y hemoglobina para facilitar el crecimiento y desarrollo del organismo. Si hay ausencia de hierro en sangre se puede producir una anemia ferropénica y si hay exceso se produce una situación tóxica: la hemocromatosis. Cuando es hereditaria suele afectar a varones de más de 50 años. Gracias a la menstruación las mujeres suelen evitar la acumulación excesiva pero tras la menopausia o una histerectomía su riesgo de padecer la enfermedad aumenta.

El hierro se adquiere a través de la alimentación y el hecho de acumular demasiado hierro genera radicales libres de oxígeno que lesionan las moléculas con las que interaccionan dañando, sobre todo, el hígado pero también puede afectar al páncreas, al corazón, a las articulaciones y al sistema endocrino.

El hierro es un oligoelemento fundamental para la vida gracias a su capacidad de adquirir y ceder electrones. Favorece, entre otras sustancias, la producción de proteínas y hemoglobina para facilitar el crecimiento y desarrollo del organismo. Si hay ausencia de hierro en sangre se puede producir una anemia ferropénica y si hay exceso se produce una situación tóxica: la hemocromatosis. Cuando es hereditaria suele afectar a varones de más de 50 años. Gracias a la menstruación las mujeres suelen evitar la acumulación excesiva pero tras la menopausia o una histerectomía su riesgo de padecer la enfermedad aumenta.

El hierro se adquiere a través de la alimentación y el hecho de acumular demasiado hierro genera radicales libres de oxígeno que lesionan las moléculas con las que interaccionan dañando, sobre todo, el hígado pero también puede afectar al páncreas, al corazón, a las articulaciones y al sistema endocrino.

 

Las causas de la hemocromatosis son: hereditarias o adquiridas. De esta forma se clasifica esta enfermedad como:

– Hemocromatosis hereditaria: Está considerada como la enfermedad hereditaria más frecuente en Occidente y se debe a una alteración genética, normalmente, por mutaciones en el gen HFE del brazo corto del cromosoma 6. Este gen participa en la regulación de la absorción del hierro. Para padecer esta enfermedad es preciso heredar el gen mutado de ambos padres; si solo se hereda uno se es portador.

– Hemocromatosis secundaria: Resultado de transfusiones de sangre, anemia hemolítica, talasemia, enfermedad hepática como la hepatitis C o la hepatopatía alcohólica.

Síntomas de la hemocromatosis:

La hemocromatosis hereditaria suele no presentar síntomas hasta los 50 años o más y los primeros signos (dolor articular, dolor abdominal, fatiga y somnolencia) pueden confundirse con otras enfermedades.

Cuando el daño ha avanzado los síntomas son:

– Diabetes.

– Enfermedad articular.

– Oscurecimiento cutáneo.

– Pérdida del deseo sexual.

– Impotencia.

– Arritmias.

– Insuficiencia cardiaca.

– Insuficiencia hepática.

Tratamiento y medicación de la hemocromatosis:

Flebotomías y quelantes del hierro

En el caso de hemocromatosis primaria el tratamiento de referencia es la flebotomía. Se trata extracción de unos 450 mililitros de sangre cada semana hasta que el hierro tenga niveles normales. Después se necesitará realizar el procedimiento con menos frecuencia.

Si la flebotomía no es posible, como suele ocurrir en la hemocromatosis secundaria, el tratamiento se realiza con quelantes del hierro, que consiguen adherirse al exceso de hierro y eliminar a través de la orina o las heces. La quelación se administra por inyección intramuscular como la deferoxamina o vía oral como la deferiprona.

El hierro es un oligoelemento fundamental para la vida gracias a su capacidad de adquirir y ceder electrones. Favorece, entre otras sustancias, la producción de proteínas y hemoglobina para facilitar el crecimiento y desarrollo del organismo. Si hay ausencia de hierro en sangre se puede producir una anemia ferropénica y si hay exceso se produce una situación tóxica: la hemocromatosis. Cuando es hereditaria suele afectar a varones de más de 50 años. Gracias a la menstruación las mujeres suelen evitar la acumulación excesiva pero tras la menopausia o una histerectomía su riesgo de padecer la enfermedad aumenta.

El hierro se adquiere a través de la alimentación y el hecho de acumular demasiado hierro genera radicales libres de oxígeno que lesionan las moléculas con las que interaccionan dañando, sobre todo, el hígado pero también puede afectar al páncreas, al corazón, a las articulaciones y al sistema endocrino.

 

 

 

 

 

 

Prevención de la hemocromatosis:

Pruebas genéticas

Realizar un análisis genético para confirmar el riesgo de padecer hemocromatosis es una medida de prevención indicada a nivel médico. Aparte, no hay que renunciar a las carnes rojas ni a los productos elaborados con sangre o los alimentos ricos en vitamina C en la dieta.

Lo que sí se debe evitar es:

 

 

– El consumo de alcohol.

– Los suplementos de hierro y de vitamina C.

– El pescado y los mariscos crudos ya que aumenta el riesgo de infecciones bacterianas a las que son propensos los pacientes con hemocromatosis.